El tema más frecuente en las consultas que recibo es el de las relaciones y
en especial, las de pareja. Y también es frecuente que mi consultante me
pregunte si su pasada o actual relación es kármica. Y mi respuesta es siempre
afirmativa y ello es así por una simple razón: ¡porque todas tus relaciones son
kármicas!.
Si partes de la aceptación de que tu vida es un proceso de aprendizaje
evolutivo, el Karma sería algo así como el carné en el que constan las materias
que has salvado, las que has dejado pendientes y las que te aguardan para
continuar progresando.
Cada vez que reencarnas, tu Alma establece un plan de estudios: te encontrarás
con tal y cual materia y para facilitarte el aprendizaje, te proveerá de
ayudantes con los que te relacionarás de los modos adecuados según la materia.
¿Y cómo saber cuáles son las materias que tienes que aprender y aprobar?
Tu Carta Natal es la gran fuente de información, porque muestra precisamente el
plan de estudios de tu vida actual y si bien todo en ella es información kármica,
es importante prestarle especial atención a dos elementos llamados Nodos
Lunares, relacionados con pasajes simbólicos de la Luna y denominados Sur y
Norte.
Observando la ubicación del Nodo Lunar Sur en tu Carta Natal, puedes obtener
valiosa información sobre tu vida anteriors: cuáles fueron tus principales metas
existenciales, en qué áreas te focalizaste, cómo fue tu personalidad, cuáles
fueron tus valores, cómo encaraste tu vida, en qué ámbitos tuviste dificultades
y te topaste con el dolor.
Observando la ubicación del Nodo Lunar Norte, puedes informarte sobre cuál es el
sentido de las experiencias que has vivido, vives y vivirás en esta encarnación,
qué metas necesitas establecer, qué transformaciones necesitas operar en tu
personalidad, qué valores necesitas incorporar, cómo necesitas encarar tu vida,
en qué ámbitos necesitas transformarte y transformar tus actitudes para acceder
al estado de plenitud, completud y felicidad.
¿Y qué papel juegan tus relaciones?
Toda persona con quien te relacionas tiene ?sin saberlo conscientemente- la
función de ayudarte. Con sus actitudes hacia ti, esa persona te pondrá en
contacto con aquello de lo que necesitas ?darte cuenta? como paso previo a la
transformación. En este sentido, puede resultar clave el analizar cuidadosamente
en tu Carta Natal todo lo vinculado a la Casa VII, el sector en el que se
muestran tus relaciones. Estudiar el signo en que está situada y los planetas y
aspectos en juego, puede significar el comenzar a ver tu realidad relacional
desde un nuevo y capacitante ángulo.
Cuando percibimos a nuestras relaciones como recursos de aprendizaje, cambia
totalmente el cómo nos sentimos respecto a ellas, pues dejamos de lado la
interminable búsqueda de ¿por qué esto, por qué fue/es asi, por qué
sucedió/sucede tal cosa, etc.? y nos preguntamos ¿para qué es esto?
Y ahí iniciamos un cambio radical que nos conducirá a nuevas realidades.
Te envío un cálido abrazo,
Alberto Suarez
Astreologia - Coaching