Dios Osiris:
En el horóscopo egipcio, el Dios Osiris es Hijo de los dioses de la Tierra y el Cielo, Gheb y Nut.
El Dios Osiris del Antiguo egipto se convirtió en el Dios de la muerte y este aspecto gozó de gran popularidad, siendo tanto ésta que reemplazó al mismo Anubis en el ritual de pesaje de corazones y juicio de almas. Se le representaba con cabeza de toro, algunas veces con cabeza de ave, etc, con el cetro y el látigo entre las manos y la corona sobre su cabeza. Algunas veces el rito de Osiris se extendía de manera tal que incluso en ciertas regiones se le llegó a considerar un dios agrario y patrono de los labradores de tierra.
Nacidos en Osiris:
A los hijos del Dios Egipto Osiris, en el horóscopo egipcio, Se le considera de gran honorabilidad y muy sobresaliente. Representa liderazgo y autoridad, por su postura y entereza. Posee seguridad en sí mismo, defiende su territorio valientemente y es capaz de dirigir a los demás.
Una persona del signo Osiris, es sincera, inteligente y directa. Posee un gran sentimiento de lealtad y son de jugar limpio y con justicia. Estos nativos suelen ser animosos y atractivos, además de sexuales. Generalmente el Osiris se lleva bien con los demás, porque no es demasiado exigente.
No esperan a que se les acerquen, más bien ellos gustan de ir al encuentro de los demás y siempre estarán dispuestos a atender razones externas, o sea, si usted tiene por amigo a un Osiris, puede estar tranquilo que estará ahí cuando lo necesite.
En ocasiones ellos protegerán más de lo ajeno que lo de ellos y jamás ignorarán un pedido de auxilio. Son muy apegados, por lo que aún estando al lado de una pareja que no sea la ideal para ellos, ahí estarán, fiel a su lado. Un hijo Osiris no abandona su casa fácilmente, a no ser por algo grande, y es difícil que se encolerice personalmente contra alguien; puede que te llame la atención, pero con cautela y sin odio. Ellos pueden ser algo explosivos en un segundo pero con la misma rapidez se tranquilizan.
A los hijos del Dios Osiris, los amarán por su carisma y su aguda penetración de la naturaleza humana. Ellos son fuertes, pueden aguantar mucha tensión sin desmayar.
Su mentalidad hace de él un buen consejero, sacerdote o psicólogo, siendo capaz de sufrir grandes dificultades y privaciones sin quejarse. Los hijos de Osiris son, en fin de cuentas, luchadores por un mundo mejor donde vivir y no descansarán hasta conseguirlo. En el amor atraerán a sus parejas como presas, las cuales después de conocerlo no se querrán alejar jamás. Son muy atractivos y sensuales, amistosos y sin pretensiones. No son muy exigentes y sí muy fieles.
El planeta regente de los hijos de Osiris es Plutón el cual le dotará de una gran energía que lo volverá invencible. Será una persona intensa, fogosa, pasional y extremista. No le gustarán las situaciones a medias e indefinidas. Vivirá cada momento con mucha intensidad y sus emociones serán profundas y duraderas. Contará con una fuerte intuición que le permitirá percibir los resultados antes de que ocurran; también podrá descubrir mentiras y situaciones ocultas a su alrededor.
Será muy directo con sus opiniones, no temerá decir la verdad en el momento adecuado. Se brindará por completo a la persona que ame y esperará la misma respuesta. Cuando sufra alguna decepción corta por completo con la persona. Contará con un caudal de energía que le llevará a estar en acción constante. Podrá perder la paciencia con facilidad y sus enojos serán temibles. A lo largo de su vida, vivirá crisis profundas que le harán cambiar su rumbo por completo, pero renacerá con más fuerzas y tenacidad.
En el amor, los hijos del Dios Osiris serán pasionales y posesivos.
Buscarán un compañero/a fuerte, decidida, con iniciativas propias y a la vez que sea femenina y/o masculina, y sensual.
Necesitará que su relación sea continúa, a todas horas. No soportará las esperas, indiferencia o indecisiones. Sus celos pueden llegar a ser desmedidos, perdiendo a veces el control, llevándole a vivir situaciones tensas.
Cuando ama lo hace sin limites y necesita la misma repuesta.
Nació para dirigir, crear, investigar y curar. Sus ideas fijas y su perseverancia le vuelven líder en cualquier lugar donde se desenvuelva. Una de sus misiones es proteger a otros, enseñar con valentía y coraje a vivir el amor con toda intensidad.
Tendrá la capacidad para descubrir secretos, investigar temas profundos, sanar a otras personas y regenerar su entorno.
Para evolucionar, su espíritu necesita aprender a controlar la agresividad, la ansiedad, intolerancia y la tendencia a ser vengativo. Evitar las actitudes extremistas e inflexibles, el querer manipular a otros y la tendencia al egoísmo y la destrucción.
Así son los hijos/hijas del Dios Osiris en el horóscopo egipcio.